
tengo, (nos) tenemos amigas brujas...
lisas arrugadas, peludas, bellas,
algunas convertidas en zapallos de noche,
invitadas a pasar la noche en vela,
otras cantadas cantantes como gallos de madrugada bien desafinadas,
sean además peinadas, o de peluqueria, aunque ganadas por el desgano...
bañadas...
llaman por teléfono y mensajean porque (nos) tenemos en los números
y las cábalas de estos tiempos,
donde de alcohol acechan en (nos) más mujeres y más narigonas,
no renegando de berrugas ni de pieles fieles...
la otra de (nos) mas aun brujita en su infinito infiel
aprieta sus edades para juntar energia de la calle y de la escoba..
reina todo la bruja de (nos) que (nos) espera.